Mar Adentro...
Estoy segura, en otra vida, estoy segura. Todo vuelve, todo regresa. Este mar espera pausado, a solas, espera…
Túmbate a mis pies, dibuja tu contorno en la arena fría, acaricia cada minúsculo grano, cada poro. Suavízame con tus manos, paséame, rompe las barreras.
Entre mi agua y mi cuerpo, escarba, busca los tesoros escondidos; entre almejas, caracolas y rocas, baila conmigo.
Solo tú sabes reconocer cuando te canto, como te mimo y te susurro, y entre olas te acaricio.
Donde mi salada lengua refresca la brisa sobre tu pecho, y me deslizo despacio hasta la oculta inmensidad de lo más simple, lo natural, lo más llano y pequeño.
Hunde tus manos en mí y siente como me estremezco.
Como todo lo que parece fácil: una caricia, un silencio, un beso, una sonrisa…
Como todo lo que fluye con la naturalidad del tiempo, lo que está ahí, como una semilla que espera el agua, la luz del sol, el aire puro y el buen tiempo…
Lo que parece sencillo y se escapa como arena entre mis dedos…
Como el reloj al que doy la vuelta a la espera de que llegue el momento en que tus pies se hundan en mi arena, y yo te arrastre con mis mareas, Mar adentro…