Saltar al contenido

Portazos

 

 

Mira, no me des portazos
eso de nada te sirve,
¿o crees tu que mis reproches
a esos golpes habrán de irse?

Cierra la puerta mansito,
ciérrala con mano humilde,
siéntate aquí, junto al fuego
y dime ahora, ¿ qué me dices?

Si, si, ya se que de noche
tu corazón queda triste,
ciérralo, pues, mas sin llave
por si acaso algo le aflige.

Si la congoja le prende
y palpitando te pide
socorro en las altas horas
¿ como has de entrar a asistirle?

Entorna no mas su puerta,
que por la rendija filtre
la luz del alba piadosa

A cuando el sol el cielo viste.
No así te cierres por dentro,
no andes trazando deslindes;
el poner puertas al campo
sabes bien para que sirve.

Echa esas llaves al río;
el amor al alma cine
con cinto que aun siendo fuerte
es a la vez muy flexible.

Sin dar portazos de enojo
puedes mostrarte muy Arme,
que esos amagos de engaño
sabes bien que no me rinden.

 

 

Mar Martínez

@marprojo

…que esos amagos de engaño sabes bien que no me rinden.

Etiquetas:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: ¡¡!El contenido está protegido!!